martes, 8 de enero de 2013

¿Por qué no trabajar un año?


Porque gracias al "no trabajo"
remunerado y ordenado,
ajustado y engrasado,
puedo vivir más cada segundo
mirando menos el reloj.

La máxima aquella

"el trabajo os hará libres"

(grabada de forma cruel y sarcástica
a escasos kilómetros de mi nueva ciudad)

se convierte a cada momento para mí
en "crear os hará libres"
privilegio guardado para los dioses,
el ideal del "no trabajador"
que aprende a cada segundo.

¿Por qué no hacerlo?

Sencillamente porque por suerte siempre estoy a tiempo, porque sigo viva y eligiendo cuando puedo, y desde esta posición esta pequeña rebeldía debe usarse de manera inteligente...
para ser consciente de que nieva,
para ser consciente de que no merecemos cada persona que nos ama,
pero tampoco merecemos cada pisotazo ,
para ser plenamente conscientes de que no, por más que nos lo repitan nuestra identidad no nos la da el trabajo.

Esto me permite ver mi cultura occidental desde otro telescopio...y me hace entender otras culturas que no tienen como valor absoluto el trabajo, para ellas tu forma de hablar, tu moral, o el trato que das a la gente que te ama o cuida (cerca están ambas cosas) es lo que te dará valor como persona. De nuevo, desde fuera,  una interesante manera de observar nuestra cultura y ver cuánto esfuerzo ponemos en la profesión.

¿Cuánto tiempo hablando de  algo que no nos hace felices? ¿Cuántas creaciones que compartir paralizadas? ¿Cuántos desacuerdos? ¿Cuántas relaciones perdidas? ¿Cuántos planes paralizados? ¿Cuántos paisajes sin observar?

Necesitamos el dinero, segunda máxima de nuestra cultura, pero la paradoja es que el dinero nos necesita urgentemente a nosotras, a todas, para que sigamos asegurando su existencia. Todo este estado de cosas, la burbuja explotada, la sangre derramándose, violencia  y más y más que queda, pobreza velada, pero, por fin, la mentira  ha quedado destapada hoy es un completo desnudo de las crueldades de lo que algunos llaman crisis yen realidad  es la "solución" de este circuito trabaja por dinero, dinero por trabajo.

¿Cómo romper? ¿Cómo provocar un verdadero cortocircuito?

En este escaso año que trabajo por aprender y sin salario, me planteo qué nos ofrece trabajar y sólo le veo sentido si nos ofrece dar y crear con los demás. Sigue siendo ese el mundo que deseo, pero no es la cultura en la que he nacido.

Hoy comprendo esa contradicción y disfruto por ello aún más de todo el tiempo que no tengo que suplicar.

El tiempo es nuestro. Ojalá pudiese gritárselo a toda persona que en este círculo perverso ha perdido la esperanza.



La verdadera rebeldía de hoy es buscar caminos que nos inviten a escapar del valor falso y que nos hagan descubrir que todo lo que merece la pena en la historia (con mayúsculas y minúsculas) de la humanidad, aunque se crease bajo las pesadas horas de trabajo y bajo sus cargas, se hizo con la ilusión de poder servir a la vida, de poder ser útil y creativo, y en ello hay un germen de crecimiento humano que no es sólo económico.

¡¡Maravillosa contradicción! Maravillosos dibujos de kafka creados en su despacho! maravillosos dibujitos entre apuntes de la carrera!!!!!!!!!


Desobedeced y amad ;)

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