viernes, 6 de septiembre de 2019

No entienden

No entienden,
no hablamos de un tal Colón
hablamos del colonialismo.

No entienden,
no hablamos de recursos
sino de personas que huyen.

No entienden,
no hablamos de guerra
sino de una paz cerrada en falso.

No entienden,
no hablamos de volver a las cavernas
sino de no envenenar nuestra comida.

No entienden,
confunden las palabras,
"terrorista", "traficantes",
y son sólo las almas que luchan.

No entienden,
no hablamos de cumplir la ley
sino de asesinar en nombre de la ley.

No entienden,
no hablamos del amor,
sino de una infinita posesión.

¿No entienden?

A veces pienso que entienden demasiado...

No entienden,

porque prefieren el lado del poder,
porque prefieren el trono a la derecha,
porque prefieren lavarse las manos,
porque prefieren no complicarse la vida
haciendo que algunas sean siempre INVISIBLES.

Para entender:
https://www.lamarea.com/2019/06/13/buscadores-de-huesos-2/


Infinito

Lluvia...viento...fuego...

que caen balanceando las plumas
de nuestro singular atrapasueños.

Armado en nuestros paseos
despidiéndonos poco a poco de la ciudad,
construyendo historias para ser contadas.

Fabricado también por la nostalgia,
por el temor a no saber usar las manos,
por la interminable sensación de quemarnos
si al fuego nos acercamos.

Fuego...
en el que la utopía se aleja,
descubriendo que la vida es corta
para vivirla asustada.

Fuego que enciende estos bosquejos
que siento cada día más nuestros.

Destruídos por los que dicen amarlos.

Almas encorvadas,
que aparecen, saludan y también se esconden.

Ellas siempre estuvieron aquí,
antes incluso de asomarnos.

Permanecen como el roble,
suceda lo que suceda,
cuente yo lo que les cuente.

Viento...fuego...incendio

Redescubrir la familia que siempre tuve,
cada día más cerca,
real e imperfecta.

Y en estas tardes verdes de lluvia
observarte dormir la siesta,
observarte cocinar la cena.

Y me gustaría pararte el mundo,
para que lo miraras lejos, allá arriba,
y mirarlo con luz eterna,
como los árboles.

Para, después, contarlo:
convertirlo en INFINITO.